No es que seamos envidiosos, pero quienes al parecer los que menos pueden nos llevan ventajas

Cuando sacamos un tiempito para salir de nuestro entorno sin importar donde encaminemos nuestros pasos, nos encontramos con desarrollos, avances, modernismos.
Y nos preguntamos, ¿Qué pasa con nosotros, por qué no tenemos lugares que hagan detenerse a los transeúntes a contemplarlos y gritar ¡Hurra, qué bello! ¿Quién lo hizo?
Y no hablo de un parque, de un malecón, de un mercado o un matadero, hablo de un lugar donde solamente acudimos cuando nos toca enterrar a nuestros familiares, amigos y conocidos.
No hay comentarios: