Niña de 13 años es ahorcada por su novio de 35

Benny Rodríguez

Juancho.- Una niña de nacionalidad haitiana fue encontrada ahorcada en la residencia donde vía con sus padres en una finca de esta comunidad, del municipio de Oviedo, de la provincia de Pedernales, de cuya muerte se menciona a su novio dominico haitiano, 22 años mayor que ella, pero no se conoce por qué fue la razón que la ahorcó.

La adolescente haitiana fue identificada como Yire Oweson, de 13 años, encontrada ahorcada en la residencia donde vivía con sus padres, propiedad del hacendado Víctor Féliz. La vivienda se encontraba sola.

Como el responsable de haberla ahorcado es señalado su novio dominico-haitiano Juan Ramón Martínez, de 35 años, quien se encuentra bajo arresto en la sede la Policía Nacional, con asiento en Pedernales.

Martínez, es interrogado por miembros de Investigaciones Criminales (DICRIM) y de Homicidios, del Departamento de la Policía Nacional, con sede en Pedernales y de ser hallado culpable le presentaran, a través del Ministerio Público, por ante el Juez de la Instrucción del Departamento Judicial de la citada provincia fronteriza.

La adolescente de nacionalidad haitiana era hija de Mafi Carol Oweson, de 52 años, quien labora en la vivienda de la referida finca, pero no se ofrecieron detalles acerca del padre.

Según el análisis del médico forense que examinó el cadáver de la niña determinó que su deceso se debió a asfixia por ahorcamiento, por lo que se dispuso el traslado del cuerpo sin vida a la Regional de Ciencias Forense con asiento en Azua.

Estudio de Unicef

Unicef presentó un estudio reciente donde afirmaba que en el mundo hay alrededor de 230 millones de niños y niñas menores de cinco años, cuyo nacimiento no se ha registrado. Según el organismo internacional que vigila que se respete el derecho de los niños, niñas y adolescentes, dijo que se calcula que 4 de cada 5 niño o niña, de entre 2 y 14 años, han sido sometidos a una disciplina violenta en el hogar.

Explicó que apenas el 8% de los niños y niñas de todo el mundo vive en países cuyas leyes los protegen del castigo corporal en todos los contextos, lo que deja al 92% sin protección legal plena.