Pastor evangélico Ezequiel Molina no objeta proyecto ley impide pastorear para lucrarse

Por Llennis Jiménez

SANTO DOMINGO: El pastor evangélico Ezequiel Molina Rosario, presidente de La Batalla de la Fe, declaró que las iglesias deben someterse a las leyes y los pastores no deben aspirar a enriquecerse con la predica ni convertir los templos en plataforma política, por lo que afirmó que no tiene objeciones con el proyecto de Ley Orgánica de Libertad Religiosa que prohíbe a las iglesias y sus ministros perseguir fines de lucro y políticos y que exige sujeción al orden público y las buenas costumbres.

Rechaza que se quiera ser empresarios de la fe.

El reverendo Molina Rosario, pastor de la iglesia Mahanaim, adelantó que va a estudiar el proyecto de ley que presentaron los senadores Eddy Mateo y Manuel Paula, legisladores con los que se reunió y les entregaron la iniciativa de ley sustantiva, la cual dispone que se penalicen las violaciones con multas de 10 a 20 salarios mínimos y la prohibición de ejercer su ministerio hasta por seis meses.

“Nosotros creemos en el orden. Actuando con discreción y con justicia, creemos en el orden vaya contra quien vaya, porque el orden nos beneficia a todos. Creo que las iglesias deben someterse al orden de urbanidad, de convivencia entre gente que trabaja y que estudia, y nosotros, que también trabajamos y estudiamos, tenemos que someternos a la tranquilidad de la familia del vecindario donde nos encontremos”, dijo para reforzar su posición no de objeción sobre esta parte de la ley.

En cuanto al enriquecimiento y a la política, dejó claro que también está de acuerdo con el espíritu de la legislación propuesta.

“No creo que la iglesia sea una plataforma para ganar o para buscar dinero ni para buscar posición política, debido a que la iglesia tiene su misión definida: predicar facilitar el reino de Dios en la tierra, que es predicarle a la gente el reino, la parte espiritual”.

Manifestó que el pastor no está para convertirse en emprendedor, sino para llevar la paz del Señor a los corazones y a los hogares.

A la comunidad evangélica dijo que el proyecto ley viene a reforzar lo que consagra la Constitución dominicana en su artículo 45.

Puntualizó que el proyecto no pone en juego el mandato de quien trabaja en el altar debe vivir del altar, pero otra cosa es enriquecerse, como transportarse en una limosina o en una avioneta, la ostentación, la exageración, como cree que hacen muchos.