Aceite de coco, la locura de las famosas
Corría el final de la década de los 50 cuando se comenzaron a demonizar las grasas saturadas utilizadas para elaborar ciertos productos alimentarios.
El motivo fue la relación que se estableció entre ellas y el aumento del colesterol y, por consiguiente, de las enfermedades cardiovasculares. La mantequilla, la manteca de cerdo, el huevo y el aceite de coco fueron las que peor salieron paradas.
En su lugar, otras grasas vegetales ganaron mucha presencia en tiempo récord dejando al aceite de coco en el olvido hasta el día de hoy.
El huevo y la mantequilla con el tiempo volvieron a ser aceptados dentro de un mercado más actualizado y de gran diversidad. Fueron analizados y recomendados en cantidades limitadas para obtener todos sus beneficios (que son muchos).
Lo mismo ha pasado con el aceite de coco, e incluso ha sabido dar un paso más allá alcanzando el mundo de la cosmética.
En la cocina…
Consumiéndolo en pequeñas dosis, en frío y preferiblemente vírgen puede ser cardiosaludable, bueno para el cerebro y antibacteriano.
En el neceser…
1- Hidrata y repara el pelo, sobre todo los medios y puntas resecas. Utilízalo como una mascarilla nocturna y acláralo a la mañana siguiente.
2- Es un aliado perfecto para nutrir la piel del rostro y del cuerpo gracias a todas sus grasas Omega. Fortalece la barrera lipídica.
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3- Los productos solares también lo están incluyendo en su formulación. El aceite de coco posee un factor de protección solar de manera natural (bloquea por sí sólo hasta un 20% de los UVA), aunque siempre se debe reforzar con más SPF.
4- También es un gran desmaquillante gracias a su textura oleosa y sirve para casi todos los tipos de pieles.
5- Su poder hidratante se aprovecha para prevenir y tratar las estrías moradas. Su utilización es aconsejable en el embarazo o al hacer una dieta, ya que la piel necesita ser elástica.
6- Los labios agrietados mejorarán su aspecto con el uso de bálsamos fabricados a base de este aceite. Ganarán en suavidad si se utiliza a diario.
El aceite de coco y sus multiusos
Hace como dos años vi como una amiga traía este tarro de Traders Joe’s y se untaba aceite de coco por todo el cuerpo. Casi me da algo, jajaja, no lo podía creer y juré que estaba loca! Pero bueno, después de preguntarle que por qué lo hacía me dio curiosidad y me lo empecé a echar y ahora le soy fiel al aceite de coco.
Aquí les pongo algunas formas caseras de usar este aceite:
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1. Crema corporal
Después de bañarme me unto el aceite por todo el cuerpo y me pongo una pijama que no me importe manchar y duermo así (la pijama hace que el aceite se absorba mejor). Al día siguiente tendrás la piel suavecita y súper humectada.
2. Para rasurarse
Cuando no tengo tiempo de meterme a la regadera uso el aceite. Lo pongo en el área que quiero rasurar y paso el rastrillo. La piel queda perfecta y sin irritaciones.
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3 . Humectar el Pelo
Hay dos formas para usarlo, yo en lo personal casi siempre hago esta: en la noche, agarro aceite y lo unto por todo el pelo, mucha gente lo hace de la mitad hacia las puntas, yo me lo pongo en todo el pelo, me hago un trenza y me acuesto a dormir. En la mañana, me lo lavo como siempre y me queda mejor que con cualquier mascarilla de hidratación. Esto lo trato de hacer una vez por semana o cada quince días.
La segunda forma es humedecer un poco el pelo, colocarte el aceite y ponerte una gorra de baño por 30 minutos. Transcurrido el tiempo te metes a bañar, la textura del pelo te va a cambiar mucho.
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4. Los labios
Lo uso como chapstick para los labios, me lo pongo en la noche y cuando viajo, que es cuando más se me resecan.
Lo uso como crema de cara, no siempre pero mínimo una vez a la semana y es una delicia. Tienes que tener cuidado por el estilo de piel tengas, en mi caso me sirve perfectamente porque soy combination skin. Como les comenté en uno de mis artículos anteriores esto lo uso mucho cuando estoy en un avión por mucho tiempo. © Proporcionado por Me lo dijo Lola
6. Las manos
Ya se acerca la época del frío y es cuando las manos más se nos resecan, así que es cuando más uso este aceite de coco, me lo pongo como si fuera crema. Traigo un tarrito chiquito en la bolsa y me lo pongo durante el día, en la noche también me unto en las manos y me pongo unos guantes especiales.
Normalmente cuando lo uso en la noche es cuando estoy en la nieve o en temperaturas muy bajas.
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7. Los pies
Sufro muchísimo de los pies y después de un fin de bodas o de muchas actividades acaban de pena.
Por eso trato de consentirme mucho los pies y me aplico aceite de coco “makes the trick”. Es como crear un mini spa en tu pies, te untas el aceite dándote masajes y después te pones tus calcetines gruesos, te duermes y no sabes la delicia. Te juro que hasta vas a dormir mejor.
No saben el antojo de coco que tenía… Creo que no quiero aceptar que ya se me acabaron mis vacaciones y ya deje la playa atrás, ja ja ja. Bueno la verdad es que ya no hace tanto calor como para mi heladito de coco, así que decidí hacer una transformación a mi antojo de helado por leche de coco.
La verdad estaba un poco nerviosa de que no me quedara, pero soy sincera me quedó espectacular; un descubrimiento más fue que… ¡logré tener mi propio aceite de coco!
Ingredientes
1 Coco
Preparación
Agarra tu coco y revisa cuál de las tres aberturas u hoyos es el más blandito, para así poder hacerle un agujero de manera más fácil. Ahora sí pon el agua de coco en la licuadora.
Ya que esté tu coco sin agua, mételo en una bolsa de tela, pégale con un martillo o golpéalo contra el piso para sacarle los pedazos. Después pon los pedazos de masa en la licuadora junto con el agua, y ahora sí, a licuar.
Cuando tienes todo licuado pasa a un procesador y alístate para tu leche de coco; dependiendo de cómo la quieras de espesa, ves si le agregas agua o no.
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El procesador va a dejar los restos del coco secos. Eso también lo puedes usar para la fruta, o todavía mejor, para unos camarones al coco. ¡Delicioso!
Por último (aquí sí hay truco), no laves el procesador. En medio se va a quedar como una grasa, sácala y haz bolitas con ellas. Empanízalas con el coco seco que sacaste del procesador y guárdalas en el refri.
Cuando te vayas a bañar saca una bolita, pásatela por el cuerpo y tu piel quedará divina.
¿Qué tal? ¿No está padre la receta? Tan fácil y con tantos beneficios. La verdad nunca había tenido la oportunidad de tener mi propio aceite de coco… tan natural. Simplemente, ¡WOW!
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